Un llamado al descanso misericordioso de Dios Por Jorge Ayona Hay días en que el cuerpo se agota… y eso es comprensible. Un largo día de trabajo, una noche en vela, una carga emocional inesperada — el cansancio físico tiene nombre, forma y razón. Pero hay otro cansancio, más sutil, más profundo: el cansancio del […]