Muéstrale al niño el camino que debe seguir, y se mantendrá en él aun en la vejez
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Dé al niño todo lo que desee, así crecerá con la idea que el mundo está en deuda con él.
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Cuando diga palabras feas (lisuras), celébrelo con risas; le hará pensar que es ingenioso, y esto le alentará a aprender frases «más ingeniosas».
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Nunca le dé instrucción espiritual alguna. Espere hasta que sea mayor de edad y entonces déjelo «decidir por su cuenta».
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Evite el uso de la palabra «incorrecto». Puede desarrollar un complejo de culpabilidad. Así más tarde cuando sea arrestado por robo, creerá que la sociedad está en su contra y que esta le persigue.
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Recoge todo lo que deje tirado, libros, zapatos y ropas. Has las cosas de modo que siempre transfiera la responsabilidad sobre otro.
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Deje que lea cualquier revista, libro o periódico, para que su mente se deleite en la basura.
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Mantenga frecuentes peleas en presencia de sus hijos, de este modo no se verán afectados cuando el hogar se deshaga.
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Dele al niño todo el dinero que desee gastar, no le permita ganarlo por sí mismo.
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Satisfaga todos sus clamores en cuanto a comida, bebida y comodidad, que sean cumplidos sus deseos sexuales.
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Póngase de su parte contra los vecinos, maestros, policías. Todos ellos están prejuiciados en contra de su «hijito».
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